El próximo 12 de noviembre, Junín llevará a cabo un operativo de compactación de un primer lote de 1.600 motos acumuladas, en el marco del Programa Nacional de Descontaminación y Compactación (PRONACOM). Esta acción se realiza en cumplimiento con la Ley Provincial N°14.547, que establece el protocolo para el tratamiento de vehículos abandonados o secuestrados tras vencer el plazo de 180 días.
Según informó Mario Olmedo, subsecretario de Control Ciudadano, la recaudación generada será destinada al Rotary Club y al Club de Leones, como parte de un esfuerzo conjunto entre el municipio y la comunidad local.
La compactación se realizará con una empresa seleccionada por PRONACOM, y los fondos recaudados se destinarán a instituciones de bien público de la ciudad. “Actualmente, en el predio de la Agencia Municipal de Seguridad Vial se encuentran entre 5.500 y 6.000 motos esperando este proceso”, detalló Olmedo, quien destacó que esta será la cuarta compactación realizada durante la actual gestión municipal.
Proceso y desafíos en la gestión de vehículos abandonados
El subsecretario Olmedo explicó que los operativos requieren de un proceso burocrático extenso, incluyendo consultas al Registro de Propiedad del Automotor y otras verificaciones judiciales. Además de las motos, el municipio trabaja en la gestión de alrededor de 100 autos abandonados que serán compactados una vez completados los trámites requeridos.
El programa incluye también alternativas para los infractores. Olmedo comentó que las motocicletas retenidas en campañas de concientización como “Sin casco no hay moto” pueden ser retiradas sin costo si el propietario adquiere un casco. No obstante, el funcionario señaló que una cantidad significativa de las motos incautadas no están en condiciones de volver a circular o no se encuentran registradas en el Registro Nacional de Propiedad Automotor, lo que limita las opciones de subasta.
Controles de alcoholemia y tránsito en Junín
Olmedo también abordó el tema de los controles viales en la ciudad, destacando un aumento en los casos de alcoholemia positiva, los cuales crecieron de 300 a 450 en comparación con el año pasado, pese a la implementación de la Ley de Alcohol Cero. “Hemos registrado niveles de hasta 1,95 grados de alcohol en sangre”, comentó, y advirtió que noviembre y diciembre suelen ser meses críticos para los siniestros viales. La Secretaría de Control Ciudadano, en conjunto con la policía provincial y el Centro de Monitoreo, lleva adelante operativos de control para mitigar riesgos, incluyendo el secuestro de motos con caños de escape antirreglamentarios y la vigilancia de picadas.
Fuente: La Verdad.