El sector ganadero argentino cerró 2024 con una leve disminución del 4% en la faena bovina interanual, según los Documentos de Tránsito Electrónico (DTE) emitidos por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa). La cifra total estimada de cabezas faenadas fue de 14 millones, aproximadamente 520.000 menos que en 2023.
Repunte insuficiente en el segundo semestre
La actividad mostró signos de recuperación en la segunda mitad del año, destacando un aumento del 5% en diciembre respecto a noviembre, aunque el promedio diario se mantuvo sin grandes cambios. En comparación con diciembre de 2023, se enviaron a faena un 9% más de animales, reflejando una mejora hacia el cierre del año.
Sin embargo, el repunte en los últimos meses no logró compensar la significativa caída registrada en el primer semestre, afectada por factores como las condiciones climáticas adversas y los desafíos económicos que impactaron al sector productivo.
Participación de hembras: una señal de alerta
Un aspecto que sigue generando preocupación en la industria es la elevada participación de hembras en la faena total. En diciembre, este indicador alcanzó el 47,5%, un nivel que, de mantenerse, podría comprometer el crecimiento del rodeo bovino en el mediano plazo.
El desafío para 2025
Con estas cifras, el sector enfrenta el desafío de estabilizar la oferta y equilibrar la participación de categorías en la faena para garantizar la sostenibilidad de la producción. Según especialistas como Ignacio Iriarte, consultor de Informe Ganadero, la industria deberá adaptarse a las condiciones del mercado y a los efectos del clima para sostener su recuperación.
Fuente: Infocampo.
