Argentina atraviesa un momento inédito en el mercado de maíz, con exportaciones récord durante los últimos meses, lo que ha llevado a una reducción significativa de las reservas del cereal. Según los datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) y de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), el país cerrará la campaña 2023/24 con el tercer mayor volumen exportado de su historia.
Cifras récord en exportaciones de maíz
En enero de 2025, Argentina exportó 2,64 millones de toneladas de maíz, superando el récord previo de 1,92 millones alcanzado en enero de la campaña pasada. Este hito se suma a un diciembre 2024 histórico, cuando se despacharon 2,42 millones de toneladas, casi 100.000 toneladas más que el récord anterior registrado en diciembre de 2020/21.
El ritmo de exportaciones no se detiene. Según la agencia marítima Nabsa, febrero también cerrará con cifras récord, con 1,8 millones de toneladas ya embarcadas y más de un millón de toneladas programadas para la próxima semana. De concretarse, febrero podría superar las 2,7 millones de toneladas exportadas, dejando atrás el récord previo de febrero de 2016 (2,60 millones de toneladas).
Con estos números, la campaña de maíz 2023/24 cerrará con exportaciones totales de 36,55 millones de toneladas, una de las tres mayores de la historia argentina.
Reservas en mínimos históricos
Si bien el volumen de exportaciones representa una gran entrada de divisas para el país, la contracara es la caída acelerada del stock interno. Según las proyecciones de la BCR, al finalizar el ciclo comercial 2024/25 el stock final de maíz en Argentina será de apenas 2,7 millones de toneladas, lo que marca una caída del 37% respecto del promedio de los últimos cinco años.
Este descenso también se refleja en la relación stock/consumo:
- En la campaña 2023/24, la relación fue del 7,2%.
- En el promedio del último lustro, se ubicó en 8,9%.
- Para el cierre de 2024/25, se estima que caerá al 5,7%, marcando un nuevo piso.
El impacto de esta reducción de reservas no solo se traduce en menores existencias internas, sino también en una mayor presión sobre los precios del maíz en el mercado argentino. La fuerte demanda externa y la necesidad de garantizar abastecimiento interno han contribuido a sostener los valores del cereal en el mercado local.
Un fenómeno que trasciende las fronteras
El caso de Argentina no es aislado, ya que Brasil enfrenta una situación similar. Según datos de Conab (Compañía Nacional de Abastecimiento), el país vecino cerrará la campaña 2024/25 con un stock final de apenas 4,8 millones de toneladas, lo que representa una relación stock/consumo de solo 3,8%, una de las más bajas de los últimos años.
Perspectivas y desafíos
La acelerada caída de reservas internas obliga a repensar la estrategia de abastecimiento del mercado local, especialmente en sectores que dependen del maíz como las industrias de alimentación animal, bioetanol y exportaciones de carne. La señal del mercado es clara: será necesario incrementar la producción en las próximas campañas para evitar una crisis de oferta.
Fuente: Bichos de Campo.
