La calidad del agua en Nueve de Julio ha encendido las alarmas tras un estudio realizado por Conciencia Agroecológica, que reveló niveles de arsénico de hasta 30 veces superiores a lo permitido por las normativas sanitarias. La preocupación es especialmente grave en la zona de Barrios Unidos, donde los resultados impulsaron la declaración de emergencia hídrica por parte del Concejo Deliberante.
El estudio: resultados alarmantes
La investigación, liderada por Guillermo Hough y realizada en colaboración con el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA), analizó muestras del agua suministrada por ABSA en Barrios Unidos. Los análisis detectaron concentraciones de arsénico de entre 140 y 360 partes por billón, cuando el límite máximo permitido por el código sanitario es de 10 partes por billón.
Hough explicó que la exposición prolongada al arsénico, clasificado como carcinógeno por la Organización Mundial de la Salud (OMS), aumenta el riesgo de enfermedades graves como cáncer, problemas cardiovasculares y metabólicos. El peligro no solo está en beber el agua, sino también en su uso para cocinar, lavar alimentos y preparar bebidas.
La respuesta de las autoridades
El grupo de activistas presentó los resultados al Ejecutivo y al Legislativo municipal, quienes declararon la emergencia hídrica. La medida busca implementar soluciones urgentes para abordar tanto la contaminación por arsénico como la escasez de agua que afecta a la región, especialmente durante los meses de verano.
Una comunidad movilizada
La situación no solo expone una crisis de calidad, sino también de cantidad. Barrios Unidos sufre de baja presión en el suministro, lo que deja a muchos vecinos sin agua durante las noches. Ante esto, Hough recomendó utilizar las canillas de ABSA en calles Piroo y Tomás Centeno, donde el agua es apta para consumo.
El sábado próximo, vecinos y autoridades se reunirán en la Plaza Héroes de Malvinas para discutir soluciones. También estará presente el abogado Fernando Cabaleiro, conocido por su trabajo en causas relacionadas con el agua potable en la región.
Un llamado a la acción conjunta
Guillermo Hough hizo un llamado a la solidaridad y la empatía: “El consumo de agua contaminada no es una elección, es una necesidad básica”. Además, subrayó la importancia de la colaboración entre la comunidad, las organizaciones sociales y las autoridades para garantizar el acceso universal a agua potable segura.
Esta crisis pone de manifiesto la urgencia de tomar medidas inmediatas para proteger la salud de los habitantes de Nueve de Julio y asegurar un recurso tan vital como el agua.
Fuente: Cadena Nueve.